10.8.16

Lugares comunes

La distinción entre nacionalismo e independentismo es útil teóricamente y para aclarar conceptos pero a la hora de la verdad son dos sentimientos que se retroalimentan. Muchos independentistas denuestan el nacionalismo porque saben, y tienen razón, que el nacionalismo tiene una base ideológica ominosa, reprobable. También porque lo relacionan con la derecha ideal. Los independentistas se identifican con la izquierda y además piensan más en el futuro que en el pasado. Así a grandes brochazos. Sin embargo, como digo, aunque sean conceptos útiles para entendernos (es un decir) no tienen una realidad que se sostenga mucho tiempo ni con autonomía suficiente. El nacionalismo, cuyas ideas no entran en mi consideración, no tiene la nobleza del independentismo, debemos admitir eso. La lástima es que el independentismo catalán está lleno de irracionalidad y no está sobrado de lo que antes llamábamos cultura.
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Tal vez la moda del turismo low cost pasará como pasó la moda de las segundas residencias. En cualquier caso el tiempo lo dirá.


Saint James' Park (Londres)

9.8.16

Dos brotes de caléndulas

Un poco de tierra, un poco de agua, mucho sol y ahí están las dos semillas germinadas. 

Veo en la prensa digital la imagen esposado de Scott V. S., el alemán troglodita que se apartó de su familia hace cinco años y al parecer de toda vida social. Había aprendido que tras usar papel higiénico en el monte para eliminarlo totalmente había que quemarlo, y por culpa de eso se ha llevado por delante el  7% del pinar de La Palma. El monte puede arder de mil maneras, muchas de ellas ajenas a la voluntad humana. Eso sin dejar de lado que no hay hidroaviones. Siempre se envían 2, ¿cuántos hay en realidad? ¿Dos?

El disgusto de Scott V. S., el troglodita-ecologista de La Palma, no será menor al de otros palmeros, porque además de ser el responsable directo le gustaba su lugar y lo habría elegido por su clima seco, sus vistas, su tranquilidad, su belleza. Me imagino el olor de la resina de los pinos antes del incendio y puedo casi percibir su aroma perfumado. No Scott V. S. pero tal vez otro hombre podrá ver las consecuencias de su ignorancia o de sus falsas creencias y sin embargo continuar pensando que el error estaba afuera, en otros factores. En que no llovía por ejemplo. Porque las falsas creencias se agarran con fuerza y no perrmiten que podamos esperar algo nuevo.

Me retiro al estudio de la historia y a admirar la parte de naturaleza que me ha tocado. Ayer estuve en la Casa del Llibre de Passeig de Gràcia y vi que aún tenían libros de Historia, no sé si menos o más que hace unos años pero sí con más difícil acceso, por estar en la vertical. Hace unos años estaban donde ahora han puesto los libros de autoayuda, los de Filosofía y los de Religión. Creo que en La Central tienen más libros de Historia, pero tengo que comprobar. En cualquier caso no sé si eso traduce el interés que reciben, que se diluyó hace tiempo. Es verosímil la teoría de que muchos votos del Partido Socialista Obrero Español se fueron a Podemos (en la primera convocatoria de elecciones de esta legislatura), pero no es verosímil pensar que los lectores de libros de Historia huyeron a los novelones históricos y a los libritos de autoayuda, o a esas novelas de tíulo larguísimo como Las sardinas que compré me gustaron mucho y a ti más. 




7.8.16

Las bicicletas de los veranos

Ayer noche cuando finalmente me dormí me despertó al rato una risotada gutural. Así como otras veces podríamos hablar de la carcajada gallina y la carcajada asnal, hoy podría hablar de la carcajada cocodrilo. Un sonido que nunca aparecería en sueños, y por eso más fastidioso que perturbador.

A mi vuelta de Londres recaigo en varias cosas al recordar. Por ejemplo, las bicicletas no circulan por las aceras. Yo al menos no me tropecé con ninguna. Ayer estuve a punto de ser atropellada. Y lo peor de todo es que de habernos chocado (iba yo caminando por la calle Aneto en bajada) el golpe se hubiera producido en el lado donde parece que empieza a curarse algo el hematoma óseo que tengo tocando las lumbares. Estos ciclistas imprudentes y audaces cuentan con sus maravillosos reflejos pero no cuentan con que quien camina pueda cambiar de dirección. Últimamente para evitar estas situaciones, tan numerosas, circulo por donde sé que los ciclistas no van a circular, arrimada a las papeleras que huelen a las cacas de perro, a las farolas meadas, y evitando ir por el centro de la calle, que es por iría.

En el caso de que se produjera un accidente de colisión entre un ciclista y un viandante, cosa que es cuestión de tiempo, el ciclista por su juventud o simplemente porque no se puede poner en el lugar de nadie no entendería el daño que ha hecho. Cuesta ya concebir el calor cuando estamos en pleno invierno o el frío cuando estamos como ahora en un día de agosto tórrido, como para hacerse una idea de lo que duele un golpe por sorpresa, y de sus duraderas consecuencias en una persona de media edad o de edad ya avanzada.

La situación, lejos de arreglarse va acumulando complejidad porque a las bicicletas se han añadido los patinetes y una especie de monociclos eléctricos que por unos 500 euros o incluso menos puede adquirir cualquiera. La legislación es clara porque se indica que los patinetes no pueden circular por la acera, pero el caso es que circulan libremente e incluso a gran velocidad. A efectos prácticos, ya que el mal parece inevitable, me pregunto si en el caso de que se produjera un accidente como el que temo (y no solo para mí) esos medios de transporte ¿cómo se considerarían a los efectos de por ejemplo una indemnización? Los ciclistas que suelen funcionar sin guardar siquiera la derecha ni la izquierda ni nada por plena acera, ¿tienen seguro?
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De la misma manera que el precio del tabaco ha tenido una clara incidencia en el tabaquismo, también lo tiene el precio de uno de esos aparatos infernales empleados casi siempre por sus ventajas para ser "libres" y "veloces".

2.8.16

Phlox panniculata


Nimfáceas






Acebo




Castaños



Quercus rubra

Invernadero de Kew




Pasarela entre los árboles en Kew





Santa Eulàlia de Vilapicina


Hortensias







Abeja de Kew

Agapantos


Alerce de Japón

Alcea nudiflora

Castaño japonés


Pagoda de Kew